Ahora que ya escuchaste el episodio, debes tener una idea más clara de lo que es para mí la manifestación, y de cómo quiero que la veas en adelante.
Te lo resumo en pocas palabras: “La manifestación es simplemente imaginar algo tantas veces, que puedes crear la serie de pasos necesarios para llevarlo a la realidad”.
¿Cómo luce esto en la vida real?
Estudié arquitectura, y nuestras tareas lucían algo así: diseña un edificio que contenga esto, esto y esto. Con esas instrucciones, nos íbamos a dibujar maneras en las que esos espacios existieran y se interconectaran. ¡Era casi como jugar a los legos!
Después de la fase inicial de diseño, tocaba “llevarlo a la
realidad”, y nos poníamos más “serios” con los detalles. Por ejemplo, una pared pasaba de ser una línea, a tener una apertura donde cabía la puerta, y decidíamos el tipo de puerta, y según el tipo de puerta era el dibujo. Y así, cada día se seguían añadiendo detalles, hasta que se convertía en un plano de construcción que alguien más usaría para llevarlo a la realidad física.
Casi magia, así siempre me parecieron mis trabajos en las oficinas de arquitectos.
¡Eso mismo lo hacemos todos los días! Solo que no le llamamos manifestación, porque no nos parece la gran cosa.
Con este correo, te invito a que pienses en esas veces que hiciste magia, y no le diste importancia.
Quizás se te ocurrió celebrar un cumpleaños, y planificaste todos los detalles, lo imaginaste tanto, que se volvió realidad…
Quizás pensaste que necesitabas ir a un médico a hacerte la revisión anual, y lo imaginaste tanto, que pudiste ver todos los pasos, desde llamar a la oficina, hacer la cita, levantarte, vestirte, llegar allá, hasta estar en la cita hablando con el doctor, y salir de la oficina, habiendo hecho esa revisión anual una realidad…
Quizás pensaste en la cena una mañana, y trajiste todos los ingredientes, y seguiste todos los pasos que tu imaginación creó, hasta que esa deliciosa cena se volvió realidad…
Creamos magia TODOS LOS DÍAS, manifestamos todos los días.
Escribe en tu libreta al menos 3 cosas que se te hayan ocurrido y que hayas traído a la realidad, y siente puro agradecimiento por tu capacidad creadora.
Esa misma capacidad creadora, y ese
agradecimiento son lo que utilizarás para tus creaciones futuras.