¿Todo el mundo puede recibir mensajes de sus guías?

 

Sí, todos podemos, unos empezamos más tarde que otros, otros no se enteran nunca y a otros no les interesa recibirlos. 

 

Con eso último en mente… nunca entrego mensajes a personas que no me los piden. 

 

Recibo guía todo el tiempo, percibo mucho sobre todos con los que interactúo (por eso antes prefería aislarme, era más fácil). 

 

Puede parecer algo hermoso, pero es hasta peligroso sentirse especial por recibir tanta guía. 

 

Te puedes creer que vienes de Salvador, que tienes todas las respuestas, y lo más peligroso: que estás en lo correcto todo el tiempo. 

 

Augusto me enseñó que cada cual debe decidir qué información desea recibir, y que esto era especialmente importante con esas canalizaciones. Por eso, estudié para poder abrir y cerrar el canal a voluntad, y decidí que sólo voy a canalizar en sesión, si le puede ayudar a la persona. 

 

Esa decisión me ayudó a expandirme, pues sin el flujo constante de mensajes al interactuar con otros, me da menos dolor de cabeza (literalmente) estar hoy frente a ti. 

 

¿Qué más hice para mejorar cómo y cuando canalizo información?

 

Entendí y internalicé que todo lo que descargo / recibo / canalizo, tiene el margen de error de mi percepción, que aunque siga en expansión, es limitada (pues nuestra percepción siempre cargará eso que aprendimos a través de nuestra crianza y sociedad). 

 

Ahí empezó la magia verdadera, y la frase que acompaña casi todo lo que hago: "te comparto una perspectiva adicional, solo tú puedes decidir qué es mejor para ti". 

 

Aquí estoy, para darte una perspectiva adicional de eso que estás viviendo, si estás list@ para dar ese paso. Y aquí también estoy, si estás list@ para abrir esa puerta a tus guías, y comenzar a percibir esa información que está a tu alrededor. 

 

Te espero pronto en sesión.

 

 

PD: Ahí te dejo una foto que me tomó Miguelo jugando en una piedra al lado del agua (a que era la reina del castillo de piedra en el que acababa de retratar a Augusto). Estar ahí para mi era como mágico, en ese momento estaban los mareos en su apogeo, y casi no podía salir de la casa. 

 

Si te fijas en mi brazo izquierdo tengo un círculo, que era un medidor de azúcar de 24 horas que tuve como una semana. Ese fue uno de los mil estudios que me hicieron para intentar descifrar qué me pasaba. 

 

Nunca lo encontraron, y justo un año después de eso me preparé para hacer las sesiones que hago junto a los guías. No podía en ese momento de juego imaginar cuánto me daría esa enfermedad misteriosa, ni cuánto crecería mi conexión con los guías gracias a ella.

 

 

 

 

 

 

 

Ya está disponible el programa de 4 semanas “Retoma el Control de tu Estado” que creé para ti, y que me tiene muy emocionada, porque sé los resultados que te va a dar. Aquí tienes más información, y todo lo que necesitas para separar.