Ese es uno de mis temas favoritos del libro “El Principito”, y hasta hace unos pocos años era genuinamente mi sueño eso de vivir sola en un
planeta.
Amo mi soledad a niveles que algunos no consideran del todo saludables. Aunque siempre que alguien insinúa que esa, mi relación favorita en el mundo no es saludable, Augusto me dice al oído: “es que todavía
no la tienen, por eso no la entienden”. Gracias a ese amor a la soledad fue que pude establecer y fortalecer mi conexión con los guías, y para mí esa es la mayor bendición de pasar tiempo a solas.
Como te contaba en este live, recientemente hice un
viaje a Egipto, más que nada, por dos motivos principales: ver cosas lindas, y pasar tiempo a solas, siendo el último punto el más importante.
A los 31 años me convertí en una novia y madrastra, y aunque he amado cada parte de estos últimos 5 años, la realidad es que de vez en cuando me hace falta mi soledad, esos espacios de silencio, de no
conversar, de solo contemplar lo que sea que tengo de frente.
Esa contemplación es una de mis maneras favoritas de meditar, y con dos niños pequeños no siempre lo puedo hacer como me gustaría.
Al principio peleaba con eso, sintiéndome mala madrastra por desear esos instantes de soledad, pero con el tiempo, aprendí a hacer las paces con cada deseo que tengo. Después de todo, no puedo dar lo que no
tengo, y si la paz me inunda estando en soledad… ¿de qué otra manera voy a transmitirles esa paz si no disfrutándola primero?
Y ahora te pregunto… ¿qué es lo que más paz te da en el mundo? ¿Lo haces a diario? ¿Qué te impide hacerlo a diario? ¿Qué estás dispuest@ a hacer hoy mismo para romper con eso que te lo
impide?
En mi caso, estuve dispuesta a no preocuparme tanto por la percepción de otros sobre de vez en cuando, escoger la soledad por encima de mi familia. Suena super fuerte, lo sé, te lo comparto porque
así de fuerte será lo que tendrás que hacer para conseguir tu paz, para poder transmitirla, y quiero que te sientas acompañad@ en el proceso.
Me despido por hoy, esperando escuchar que haces para tener tu paz aunque otros no lo entiendan, y que todo lo que te comparto te ayude tanto como me ha ayudado a mí y, como siempre te pido, si conoces a alguien a
quien esto que comparto le puede ayudar. ¡Mándalo pa'cá!
¡Te espero cada miércoles en YouTube!