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durante la meditación, para incorporarlo a tu vida diaria durante toda esta semana. Todos los videos están disponibles permanentemente en el canal, y los puedes ver usando este enlace.
Ayer fue el curso, y una vez más, salí con una enorme paz, y confirmando que aunque la duda venga a visitarme de vez en cuando, estoy en donde tengo que estar ahora mismo.
¿Te ha pasado?
, estoy en un punto en mi vida en el que siento que soy una descarada, y que hago todo lo que se me ocurre sin preocuparme mucho de la opinión de otros sobre mí, pero te cuento que no siempre fui así, y que me tomó un par de peleas conmigo misma llegar hasta aquí.
Quiero regalarte una técnica que me ayudó a alcanzar este nivel de desfachatez que no pensé que alcanzaría. Es más sencillo de lo que crees, pero no por ser sencillo, quiere decir que sea fácil, como tanto en la vida.
Aquí va: identifica el motivo real de tu vergüenza, y sánalo de raíz.
Lo sé, sueno bien descarada diciéndote esto, y reduciendo un problema que nos limita tanto a una solución tan sencilla. Créeme, encontrar el motivo real de mi vergüenza, me ayudó a ser así de descarada, y a hablarte como te hablo hoy en día. Si me hubieras conocido hace apenas 1 año, no hubieras escuchado algo así de mi parte, andaba toda
preocupada por lo que pensarías de mí si compartiera este tipo de consejos.
En el live live del próximo miércoles te hablaré un poco más sobre la vergüenza, pero hoy quería dejarte una película que me enseñó mucho sobre la verdadera libertad. ¿Por qué te hablo ahora sobre la libertad? Porque la vergüenza es una cárcel invisible, que muchas veces no queremos ver
así.
La película se llama The Prophet, y está basada en un libro de Khalil Gibran, poeta, pintor, novelista y ensayista libanés. En la película, hay un escritor extranjero, preso político bajo arresto domiciliario, y trata sobre la relación que él desarrolla con una niña que quedó muda tras la muerte de su padre. Desde su cárcel, ayuda a la
niña a encontrar la libertad, de forma inesperada.
No te quiero dañar la película, pero mi frase favorita es una solución que él le da a la niña a algunos problemas que se presentan: “you can fly away”. Es su manera de demostrarle que siempre somos libres, sin importar las cárceles, reales o simbólicas, en las que nos encontremos.
Una vez entendí que la libertad empieza en mi interior, y que no es otra cosa que un cambio de percepción, pude ser libre, de la vergüenza, y de muchas otras cárceles en las que yo misma me había puesto. Aquí te dejo un live en el que te contaba sobre las cárceles, si quieres ver algunos ejemplos.
Ya me voy despidiendo por hoy, deseosa de que todo lo que comparto contigo te siga ayudando a crecer en consciencia, y de que te conviertas en un@ descarad@ verdaderamente libre, como yo.
¡Nos vemos a las 7 PM!